Visto el interés que ha suscitado la intervención de Roger Schank (como lo acreditan todos los comentarios generados), y como el espacio de comentarios me parece poco adecuado, escribiré a continuación una reflexión un poco mas larga.
1- Agradecimiento: tanto Roger Schank como Sebastian Barajas, confiaron desde el principio en el CEJFE (y en mi), y a la primera oportunidad y sin condición alguna se decidieron acudir. Decidimos, con su importante presencia, abrir un ciclo formativo nuevo al que llamamos Innovación en Formación (nombre nada original). Como con todo lo nuevo, quisimos iniciarlo con cautela. Lo planteamos en dos convocatorias: una inicial de 11 a 12 dirigida a responsables de formación (jefes de unidad y de área del CEJFE, de l’EAPC, del Departament d’Educació, de ayuntamientos, algunos profesores universitarios, consultores expertos en formación, etc. Fue muy bien. Sin ningún tipo de intervención previa se desarrolló un debate sereno profundizando en aspectos procedimentales de la experiencia implantada en La Salle. Tanto Sebastián como Roger estuvieron muy convincentes y, si se me permite, brillantes. Fue en la segunda convocatoria, la libre, a la que acudieron muchas mas personas (122 inscritos y 110 asistentes) donde hubo, lo que yo llamaría, choque de trenes. En parte por problemas de traducción, que hizo que nos perdiéramos tono, argot, giros personales -todo eso que hace personal la comunicación- ,(y en cambio se nos devolvía, por el servicio de interpretación, un discurso mas bien plano);y en parte, quizás, por la necesidad cognitiva que ya hemos adquirido en esta época de sobreabundancia informativa, de valorar poco y mal todo lo que no sea una versión radicalmente nueva y diferente de cualquier producto anterior (aunque sea por un par de días, que es lo que tarda en aparecer otra versión nueva). Éstos dos factores, a mi juicio provocaron algunas intervenciones, que después se han ido contextualizando y matizando, las cuales desviaron el mensaje central de los ponentes. .
2- Reconocimiento: personas que conocen bien a Roger me han hecho llegar su opinión autorizada (entre ellos Javier Martinez Aldanondo, el cual prefiere no intervenir en el debate por razones obvias de no asistencia) .Esto nos dice:
-Roger es dueño de una larga carrera que arranca en tiempos de la eclosión de la inteligencia artificial hace más de 4 décadas. Fue el director más joven que ha tenido el laboratorio de inteligencia artificial de la universidad de Yale (no cumplía los 30años cuando lo nombraron a finales de los 60 …). El Departamento de Estado de USA le entregó una importante cantidad de fondos para investigar. Al que Andersen Consulting y otras empresas destacadas apoyaron financieramente para crear un Instituto de Ciencias del Aprendizaje … Esto significa que hace mucho que enfrentó problemas que mucha gente recién se plantea respecto al aprendizaje, el conocimiento, la memoria, la tecnología. Es reconocido por tanto como investigador y experto a nivel mundial.
-A nivel profesional, creo que hay pocas dudas acerca de los logros de Roger. No solo por su “producción” intelectual que es inmensa y fácil de evaluar sino por su aplicación a la realidad. Roger ha abierto líneas de trabajo y pensamiento donde antes no había nada (aprendizaje apoyado por tecnología), ha pensado y escrito pero sobre todo y lo más importante, ha pasado de las ideas a los hechos. Ha creado empresas, ha creado productos, ha trabajado con clientes, ha diseñado curriculums, ha creado herramientas … es decir, ha llevado sus ideas a la realidad, las ha probado y ha revolucionado varios ámbitos. Y esto no es para nada frecuente. Se podrá estar de acuerdo o no con sus planteamientos pero no conozco nadie que pueda mostrar los resultados que ha conseguido Roger más allá de las ideas. A lo largo todo de este tiempo, se ha codeado con los principales hombres de negocios, intelectuales, políticos, etc. de todo el mundo antes quienes nunca se ha mordido la lengua.
-Hace ya años que Roger se aburrió de perder el tiempo en tratar de convencer a la gente de sus ideas y de la necesidad de cambiar la educación y decidió hacerlo él directamente. Y como es fácil de comprobar, está totalmente convencido de lo que dice, no solo porque lo crea sino porque lo ha comprobado, lo ha vivido. Sin embargo hoy se da una curiosa paradoja: la mayoría de personas está de acuerdo en que el modelo educativo tiene claras deficiencias y que la mejor manera de aprender es haciendo. No es nada nuevo y casi todos ya coinciden en ello (no era así hace poco). Pero sin embargo, no basta con saberlo si no lo aplicas y el 99,9% de la gente que dice estar de acuerdo, luego no lo lleva a la realidad. Muchos de ellos dicen “yo sé que es mucho más efectivo que mis alumnos practiquen en lugar de darles lecciones magistrales pero no sé cómo hacerlo”. Y es natural, ese cambio no es fácil pero tiene solución: se puede aprender a rediseñar tus clases en términos de proyectos, actividades, desafíos, errores, feedback, etc. El conflicto suele venir cuando hay gente que proclama “yo ya lo hago así” y cuando te asomas a verlo, lo que hace no tiene absolutamente nada que ver. Y eso tiene una doble lectura con connotaciones negativas porque de alguna manera, menosprecian la complejidad de ese cambio de clase magistral a aprender haciendo y por otro, lo que ellos hacen es muchas veces casi una parodia.
3-Respeto: nada mejor que traer aquí las propias palabras de Roger Schank.
4-Aprendizaje: como conclusión general, hoy sabemos un poco mas sobre LBD, y sabemos mucho más (gracias otra vez Sebastian) de metodologías para llevar la teoría a la practica. Nuestra asignatura pendiente.