De becario a ponente en un instante

Amalio Rey, la semana pasada, nos hablaba del sesgo del experto. Al situarlo en el ámbito público, mientras lo leía, no dejaba de pensar si se refería a alguien conocido ‐o incluso, a mí mismo-.  Si somos sinceros, por el simple efecto demográfico, muchos profesionales del ámbito público ya podríamos pasar por esa etapa de veteranía que nos autoriza a prescribir/desautorizar aquello que se puede y  no se puede hacer.

Recordaba que cuando éramos más jóvenes veíamos en los mayores, a veces de forma poco crítica, una barrera a la innovación, basada -casi exclusivamente- en el factor generacional. Y a esto se une, de forma bastante dolorosa, las reflexiones de algunos compañeros y compañeras que, siendo autocríticos y sinceros, me comentan que después de 10 o 15 años haciendo el mismo trabajo y en el mismo puesto, por muy bueno que seas, ya has agotado tu potencial transformador. (Lo cual, de paso, permite destacar la falta de mecanismos de reconocimiento del desempeño y de sistemas de carrera que incentiven el desarrollo en el puesto de trabajo, o simplemente de sistemas que los «enriquezcan » vía movilidad horizontal. Una gestión adecuada de estos mecanismos evitaría la primacía del cambio de puesto únicamente por vía promoción, con la perdida de capital humano y experiencia que suponen y, como tampoco hay puestos de promoción para todos y todas, el anquilosamiento en los puestos )

Pero, no nos desviemos😉. La reflexión con la iniciaba el post me llevó a otra, aún más personal (la que da título al post).  Y permitidme que, en esta ocasión, hable de mi centro de trabajo: el CEJFE.

Imágenes del cicle Cinema i Justicia. Entre otros, intervinieron: Jordi Sanchez, Pep Prieto,Desideree de Fez, Maria Adell,Toni Roig, Ivan Pintor Iranzo, y Carlos Tabernero

Hace ahora menos de un año, cuándo preparábamos uno de los ciclos de Formación Abierta[1],   Cicle Cine i Justícia, con tres sesiones diferentes  dedicadas a la Administración de Justicia, a la Administración General y a los Servicios Penitenciarios, observamos,  con gran sorpresa, que uno de nuestros becarios, Pablo Muñoz,  que tenía asignadas labores de logística y de acompañamiento a los ponentes, en un momento determinado,  ocupó el espacio central en la tarima y, más allá de su atribución de acompañamiento, comenzó a presentar, primero, y analizar después, el ciclo,  a la vez que glosaba  la figura de las personas que le acompañaban en la mesa. Bastaron solo 30 segundos de su intervención para mostrar a los atónitos espectadores que desconocíamos esa nueva faceta, que estábamos delante de un verdadero experto. Tanto es así que, en ciclos posteriores, la relevancia y calidad que han ganado , ha sido notoria y ya es el comisario del ciclo.

Pablo Muñoz con Jordi Sanchez y Eulàlia Iglesias Huix comentado la pelicula central de segundo ciclo, dedicado a la Violencia contra la mujer , A Separation
Segunda Edición del ciclo comisariada ya por Pablo Muñoz con Jordi Sanchez y Eulàlia Iglesias Huix

Pero más allá de la anécdota, lo relevante es otra cosa: la capacidad de aprender de las nuevas incorporaciones.

Lo constatamos, tras una larga entrevista que el equipo directivo del CEJFE, en las visitas de aprendizaje que hacemos, mantuvimos con los responsables de Barcelona Activa.

 Barcelona Activa,  pasa  hoy por ser una de las grandes organizaciones que está innovando en formación y aprendizaje. Tienen un público externo, al que dirigen su actividad, muy devoto de su programación, la cual es altísimamente valorada; y un público interno, sus trabajadores (más de 600), a los cuales también están aportando novedades. Pues bien, el director de Barcelona Activa nos decía que como fuente de aprendizaje para sus diferentes programaciones, están muy atentos, tanto a los nuevos profesionales jóvenes que se incorporan, como a los becarios con los que cuentan.

Y, efectivamente, el CEJFE acoge cada año más de 14 becarios y becarias diferentes, de los cuales, si somos justos y hacemos memoria, cada uno de ellos y de ellas, bajo esta mirada apreciativa, suelen aportar – si somos capaces de librarnos del sesgo del experto-, muy buenos inputs a la organización. El caso de Pablo, por ejemplo.

Y en esta relación todos nos enriquecemos. El lunes pasado, por ejemplo, después de publicar en mi blog la entrada Modernos sin pretenderlo, en la que citaba a la película Héroe por accidente, Pablo se me acercó , y ya en su rol de experto , me dijo:

Jesús no sabes lo que acabas de hacer citando a Héroe por accidente. Existen varios elementos en la cultura cinematográfica que debes conocer. Más allá de su  prolífico director Stephen Frears, es muy relevante su guionista David Webb Peoples, que en su vida  solo firmó tres guiones y  los tres grandes éxitos… Sin Perdón (que vendió a Clint Eastwood en los 80, con la promesa del propio Eastwood de que esperaría diez años a tener la edad del protagonista), Blade Runner que escribió para Warner Bros y Héroe por accidente.  Y, junto a su esposa, 12 Monos para Terry Gilliam, inspirado en un mediometraje francés llamado La Jetée (presente en youtube: https://www.youtube.com/watch?v=aLfXCkFQtXw )


[1] Creo que, en su conjunto, esta modalidad de programación, con más de 60 jornadas anuales , es una de las  mejores prácticas en formación/aprendizaje/divulgación que acreditan,  en un rol de vanguardia, cualquier centro de formación en el ámbito público, como nexo necesario entre la Administración y la sociedad.

2 comentarios

  1. Muy bueno el post, Jesús. ¡¡cuanta razón tienes!! Esto de que la gente que llega nueva puede ser una fuente super rica de oportunidades, y sobre todo, en la administración pública por el cambio generacional que significan, es algo fácil de entender, pero la clave, lo verdaderamente diferencial, es «sistematizar» ese aprovechamiento. No debería ser un accidente feliz, como parece que ocurrió con Pablo. Yo espero que después de la experiencia que habéis tenido con él, ya haya algún «sistema» que ayude a aflorar ese talento en la gente que llega nueva, entre ellos, los becarios, para que salgan muchos Pablo’s 🙂
    un saludo

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    • Mucho me temo Amalio que para sistematizar algo hay que tenerlo muy maduro. Y en estas cosas, va importa más el talante individual de directivos que no la sistematicidad organizacional… de todas maneras los que creemos en el aprendizaje, también creemos en su transferencia. Transferencia entre organizaciones como vimos nosotros en Barcelona Activa.

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