Lo hablaba el pasado viernes con Sergio Vasquez refiriéndome a los MOOCs y de los que hablaremos en Expoelearning el próximo 13 de marzo. Éstos ganarían mucho (por lo menos los xMOOC) si se les adicionase más espacio de aprendizaje social y de compartición (estoy de acuerdo con Albert Sangrà en que ahora, en muchos casos, se sirven de un modelo pedagógico tradicional y que estos han de evolucionar). Pues bien, comentaba con Sergio -medio en broma medio en serio- , que una APP que cruce intereses de estudiantes y los agrupe por afinidades y perfiles para completar el ciclo de aprendizaje con interacción social (tipo meetic) seguro que triunfaría.
Soy de la opinión que el componente social es la una de las claves más importantes en el proceso de aprendizaje. Otra prueba más. Acabamos de escuchar una magnifica conferencia sobre coworking a cargo de Yoel Caraso, Cristina Martinez-Sandoval y Albert Cañigueral (coworker y especialista en consumo colaborativo) en la que explican el magnífico presente y el futuro prometedor del movimiento coworking. Como conclusión saco que si estos espacios aportan de verdad valor añadido es por la labor que hacen de conexión permanente entre los coworkers. Y no se improvisa poniendo (sólo) una cafetería o jugando con la disposición del mobiliario. Te tienes que emplear a fondo para que ocurran las cosas. Yoel Caraso lo tiene muy claro y explica que, precisamente en MOB, es lo que mas trabajo les lleva. Pero, como contrapartida, es lo que engancha a los coworkers y les da la oportunidad de enriquecerse mutuamente.